Tener una relación de pareja es muy complicado, pero eso no es algo nuevo, ya lo sabe todo el que ha estado metido e una relación de este tipo. El matrimonio, como concepto legal de la unión entre dos personas, supone la extensión de esta idea de pareja, con el añadido de tener repercusiones legales. Si rompemos con nuestro novio o novia, será complicado, pero se rompe y ahí queda todo. Si queremos romper nuestro matrimonio, el papeleo suele ser pesado, aunque cada vez menos, y las trabas legales son demasiadas. Esto hace que muchos intenten salvar su matrimonio a toda costa. Aquí os daremos consejos para ver desde las primeras señales que la cosa no va como debería.
Partiendo de la base de que el matrimonio es la unión de dos personas que se aman, se respetan y se valoran, la confianza inherente a la relación es algo primordial para que el matrimonio se mantenga en buena forma. En el momento en que empiezan las dudas, los celos y cosas por el estilo, la fortaleza del matrimonio se resiente de forma invariable. La confianza se basa en la sinceridad, y esta es la clave para mantener fuerte nuestro matrimonio. Problemas habrá siempre, pero de nosotros depende el solucionarlos o no, y para eso, nada mejor que ser claros y sinceros con nuestra pareja.
El ritmo de vida actual separa también en muchas ocasiones a las parejas, que solo se ven
unas pocas horas al día, y con todo el cansancio acumulado. Esto puede ser también algo perjudicial, ya que podríamos pagar los platos rotos con nuestra pareja, sin que tenga culpa de nada. Igual sucede cuando deseamos pasar más tiempo con nuestras amistades o que con nuestra propia pareja, dejándola en un segundo plano demasiado apartado. Todos estos motivos son síntoma de que algo va mal en la pareja, y de que tenemos que actuar rápido si queremos solucionarlo.
A mi me ayudo mucho a recuperar mi matrimonio la guía de Ana Perez, si realmente tienes esperanzas y ganas de salvar tu relación, aquí aprenderás como hacerlo. https://sexxologa.com/reactiva-tu-relacion/