La noche de Fin de Año o Nochevieja, como se la conoce en algunos países latinos, es una de las veladas más mágicas e importantes, ya que supone el cambio de un año a otro. Estamos acostumbrados a celebrarla de fiesta, con nuestros amigos, después de haber cenado con la familia, y realizando todo tipo de ritos con las campanadas, como el de comer uvas en España. Sin embargo, hay muchos y muy diferentes planes para celebrar la noche de Fin de Año de una forma más romántica e íntima con nuestra pareja.
Lo más socorrido es viajar a algún sitio romántico, como París, la ciudad del amor, o Roma, aunque también existen otros destinos más sofisticados, como Buenos Aires, Nueva York o Londres. En todas estas ciudades la Navidad también se celebra por todo lo alto, y puede ser una buena experiencia para conocer los ritos de otros países y culturas mientras pasamos unos días románticos junto a nuestra pareja.
También podemos disfrutar de la noche de Fin de Año sin tener que salir de nuestra propia ciudad, acudiendo a una cena de gala y posterior cotillón en algún hotel elegante, por ejemplo. Algo que se está dando mucho en la alta sociedad en los últimos tiempos, por lo que podríamos coincidir con gente de la burguesía o con los más ricos de nuestro ciudad en la misma sala de baile, algo que no ocurre todos los días. Eso sí, habrá que ir preparando el bolsillo.
Pasar la noche fuera de casa es algo casi obligado, pero podemos sentirnos como en nuestro propio hogar en alguno de los complejos rurales que tanto abundan en nuestro país. Ir a esquiar a zonas de montaña, alojarnos en hoteles con spa y centro de masajes, salir de crucero o incluso celebrarlo en un iglú… Las posibilidades son casi infinitas, y en muchos casos dependerá solo de cuanto podamos gastarnos. El caso es recibir el nuevo año 2013 de una forma especial y atípica, a ver si así conseguimos más suerte.
